Cuenta la leyenda que en la capilla Rosslyn, en Edimburgo, Escocia, existe una pequeña joya arquitectónica llamada el pilar del aprendiz, Según cuenta la historia, el maestro albañil que se encargaba de realizar la capilla decidió viajar a Roma para inspirarse en los magníficos pilares de la arquitectura romana. Durante su ausencia, su joven aprendiz se quedó en Edimburgo puliendo los diseños de su maestro. Sin embargo, cuentan que durante un sueño el joven vio un magnífico pilar ricamente decorado como nunca había visto hacer a su maestro. Sin vacilar, el aprendiz se dispuso a trabajar hasta que ver acabada su obra maestra. Tiempo después, el maestro albañil regresó de Roma y al ver tan precioso pilar preguntó quién lo había realizado. Al enterarse que había sido su propio aprendiz, cayó preso de la ira y la envidia y cuanto tuvo ocasión el maestro artesano decidió acabar con la vida del discípulo. De este modo, todo cuanto nos queda del gran genio artístico de este pobre aprendiz es el maravilloso pilar tallado en piedra de la capilla Rosslyn que tenéis a continuación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario